martes, 26 de mayo de 2015

Después del día de después

¡Hola a tod@s!

Esten atentón a sus pantallas porque lo que van a ver de hoy y hasta quien sabe cuando estará en los libros de historia de los próximos años.

Pasada la jornada de reflexión, pasadas las elecciones y pasado el día de después hoy ha empezado el baile de sillas, ruedas de prensa, negociaciones, declaraciones  a cada cual mas variopinta y un cruce de elogios deliberadamente cpnvenidos donde antes solo había desprecio e incluso faltas de educación.
La realidad tangible es que estamos asistiendo a una nueva transición, la transición del siglo XXI, que como la anterior nace de la política y como la anterior nace del clamor popular por la insostenible situación del país. La diferencia radica en que en esta ocasión lo que se pretende no es un adelanto social, cultural y económico para equipararnos con los países de nuestro entorno sino la recuperación de todo alcanzado tras tanto tiempo de reivindicación y que con tanta diligencia han consentido pulverizar nuestros mandatarios actuales.

Todas las miradas están puestas en las distintas plataformas surgidas en estos años. Mucha es la expectación  que concentran y aunque parece que tienen sus ideas completamente definidas deberán realizar sacrificios en muchos emplazamientos en pro de una gobernabilidad factible, entendiéndose pues un acto de responsabilidad. Esperemos que cumplan lo que prometen y no sean más de lo mismo. Una cosa esta clara, hacerlo peor será muy difícil.

Los dos máximos exponentes de esta regeneración son, como no podía ser de otra forma, dos mujeres que además vienen de lugares diferentes y generaciones distintas: Ada Colau y Manuela Carmena. Solo puedo decir que siento una envidia sana por los barceloneses y madrileños.

¡Hasta pronto!

domingo, 10 de mayo de 2015

Europa

¡Hola a tod@s!

Sigo aquí. El volumen de trabajo y estudios me esta haciendo imposible actualizar el blog con la frecuencia que me gustaría pero no me he olvidado de escribir.

Esta semana se ha celebrado en Día de Europa que conmemora el fin de la Segunda Guerra Mundial en el citado continente, este año además se cumplen 70 años del fin de la contienda. Existe la norma no escrita de que este tipo de efemérides se celebren cada diez años - quizás en este caso también se conmemoren los 75- lo que convierte éste en el último evento en el que participarán testigos directos del suceso.
Tanto tiempo y tantas cosas escritas después aun no nos hemos deshecho de los tabúes y prejuicios que transforman a los hombres en bestias, pues en las guerras no hay buenos y malos, ganadores y perdedores, victorias o derrotas, solo hay muerte y dolor de personas inocentes a manos de otras personas no tan inocentes pero si ingenuas e ignorantes. Como dijo Churchill "la guerra es cuando dos jóvenes que no se conocen y no se odian se matan entre si por orden  de dos viejos que si se conocen y se odian".

Hoy el mundo sigue envuelto en guerras disfrazadas con ideologías pseudo religiosas, que se nutren del terror de quienes no tienen nada mas que su propia vida. Sin una solución factible a ningún plazo imaginable lo único que debemos tener claro es que debemos ofrecer el respete que merecemos y que la violencia solo genera violencia.

¡Hasta pronto!